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miércoles, 13 de julio de 2011

De vuelta a la realidad

Que si, que vale. Me he gastado veinticinco. Solo son veinticinco. ¿Sabéis?Autoconvencerse no es fácil. Pero solo son veinticinco. La falda era muy mona, monísima. Rosalisa, pequeña y mini, o sí, mini. Si era barata. ¿No? Para ser de marca y todo eso.  Pero... ¿A quien demonios intento engañar?. La falda esta sobre mi cama. Y al lado hay una camiseta de tirantas. Debajo de la cama hay unos zapatos de talla treinta y sietePradda, Gucci, Valentino, es el título de la revista que hay abierta sobre la cama al lado de todo un maquillaje de cincuenta dolares. Ya esta, nada mas. Bueno, excepto la mascarilla nueva y los dos pares de pendientes. A, una cosa que se me ha olvidado comentaros, MET, lleva escrito entre líneas las palabras compradora compulsiva. Pero lo peor no es eso. Lo peor es toda la ropa que hay en la puerta dentro de una bolsa de plastico. Para los mas pobres.Pantalones marronesblusas con flores, zapatos planos (¿en que estaba pensando?), camisetas con el cuello hasta arriba y jerseys de punto. Y mi armario esta lleno de faldas, vestidos, medias, ligas, y maquillaje, mucho maquillaje. Tanto que parece el armario de una Barbie, como yo, yo tambien parezco una Barbie.

He desterrado mi epoca degradada del armario y de mi vida. Y me siento fatal, mal, realmente me siento genial. Genial. Porque cuando me estaba duchando ayer me di cuenta de mis puntas quemadas, y me puse puesto mascarilla, me puse tambien crema en todo el cuerpo y me apliqué cientos de cremas anti-acne, por si acaso. Y ahora a las siete de la mañana me estoy maquillando, me acabo de planchar el pelo, y toda la ropa de encima de mi cama acaba de desaparecer, puesta en mi cuerpo. Me llevé la revista a la planta de abajo, y lo peor, fue abrir la nevera y coger una barrita Special K, baja en calorías, luego salí de mi casa. Lista para ir al instituto. Porque la falda que me compré la tarde del Sabado me habia hecho darme cuenta de una cosa. Vivo para ser MET.
Seel.
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